«Yo soy yo y mi circunstancia, y si no la salvo a ella no me salvo yo»
José Ortega y Gasset – Meditaciones del Quijote, 1914
Un enorme placer saludarlos nuevamente a través de esta revista, quiero iniciar haciendo énfasis en la importancia de la frase con la que estamos abriendo el artículo de este mes, las “circunstancias” que vive una persona por lo regular son las que definen su vida y no los planes y sueños que esta misma persona halla diseñado; por circunstancia entendemos la condición que acompaña, causa o determina a una persona, una cosa o un hecho determinados, y abundaremos diciendo que estás situaciones muchas veces se salen de nuestro control y por lo tanto terminan absorbiéndonos en su vorágine natural.
Es importante señalar que esas circunstancias, problemas o adversidades en un 90% de los casos las provocamos nosotros mismos, es como en lenguaje coloquial decir, “le buscamos 3 pies al gato sabiendo que tiene 4”y cuando estamos inmersos en tal situación nos quedamos estáticos sin poder reaccionar, y las tres premisas básicas que hoy quiero compartirte para que logres “salvar a tu circunstancia para poder salvarte tu” son las que a continuación te describo;
1.- CAPACIDAD DE REACCIÓN
Para Ortega y Gasset, la perspectiva es la forma que adopta la realidad para el individuo, pues para él, cada sujeto tiene su propia forma de acceder a la realidad, su propia parte de verdad, que puede ser incluso contradictoria con la de los demás, desde este punto de vista es importante moverse, rápido, reaccionar y enfrentar cualquier situación por difícil que parezca para poder seguir teniendo control sobre las situaciones que alteren el orden diseñado en su trayecto de vida o en el peor de los casos que las alteraciones o afectaciones sean menores.
2.- RESPUESTA BAJO PRESIÓN
En la vida cuando enfrentamos situaciones de riesgo nuestras emociones se manifiestan de manera natural y sin pedirnos permiso, sentimos ansiedad, miedo, angustia, etc. Estas emociones “paralizan” nuestro actuar, si mi intención es despertar tu liderazgo desde cualquier parte donde estés y te llegue esta información permíteme decirte que vivir con miedo es vivir a medias, toma riesgos y ante situaciones difíciles muestra el carácter, manifiesta toda tu grandeza y logra que nada te aparte de tus sueños.
3.- CAPACIDAD DE ADAPTACIÓN
Sigamos con el análisis:
En nuestra formación académica, obtenemos conocimientos estructurados en materias, temas y campos del saber, después de analizar el método de estudios y el plan curricular de diferentes carreras universitarias en México, no encontramos desde la educación inicial hasta el nivel superior, ninguna materia que oriente a las personas a desarrollar, de manera profunda y eficaz, su inteligencia emocional, está es la que permite desarrollar la capacidad de subsistencia ante situaciones adversas, adaptación a nuevas formas y estilos de vida, fortaleza y perseverancia para vencer retos difíciles y estimular el pensamiento positivo que impulsa a la cima de la realización como seres humanos.
Los programas educativos básicos abordan materias como matemáticas, español, ciencias naturales, ciencias sociales, pero en ningún plan de estudios existe una materia que trabaje sobre la inteligencia emocional del niño, que lo enseñe a poner en práctica el diez que aparece en su boleta de calificaciones, que lo haga aplicar en sus vivencias los conocimientos que adquirió mediante sus programas de estudio, suele pasar que el maestro se limite enseñando conocimientos sin saber cómo deben ayudar estos en la vida cotidiana, infinidad de ejemplos ponen de manifiesto que alumnos destacados en la escuela, en su vida profesional no logran definir su personalidad, ni se proyectan socialmente como los estudiantes exitosos que fueron alguna vez, por el contrario, se observan infinidad de hombres y mujeres exitosos que en su vida académica dieron mucho de qué hablar, alumnos de bajas calificaciones que sin presión alguna se destacan mejor laboral, familiar y económicamente.
Ejemplos sobran, por citar a un personaje ilustre, tenemos a Albert Einstein, durante su vida académica siempre fue criticado, mostro mala conducta y bajo rendimiento académico, sus maestros no le auguraban ningún progreso en la vida y hasta nuestros días su pensamiento ejerce una gran influencia por las aportaciones que realizó en ciencia y tecnología.

Un estudio hecho por especialistas en esta área, demuestra una tendencia mundial de la actual generación de niños a tener más conflictos emocionales que la anterior, a ser más solitarios y deprimidos, airados e indisciplinados, más nerviosos y propensos a preocuparse, más impulsivos y agresivos.

La capacidad de controlar una emoción de un momento es importante para la comprensión de uno mismo, Estimular la capacidad de manejar las emociones, liberarse de la irritabilidad, serenarse rápidamente, controlar la ansiedad, la depresión y las melancolías excesivas, son formas de autocontrol que debemos practicar constantemente para tener una vida placentera
En mi opinión, generalmente se educa para ganar, no para vivir, en las situaciones más cotidianas, se observa un sentido estricto de competencia, estudiar para obtener las mejores calificaciones, jugar para ganar, y cuando la derrota llega, no sabemos cómo comportarnos, es en ese momento cuando se enfrenta un conflicto emocional interno y la tendencia derrotista que marca el futuro inmediato, debido a la presión generada y al miedo, lo que se obtiene es todo lo contrario de lo que se quiere, en mi experiencia pedagógica con niños es notorio este suceso, el niño difícilmente es estimulado para que disfrute su aprendizaje, por el contrario se le controla y su aprendizaje está marcado por la rigidez y las amenazas de afectarlo en sus calificaciones, la desesperación por su mal comportamiento hace que se le reprima sin indagar el porqué de sus actitudes negativas, se analiza al individuo pero no el hecho social.
Considero elemental enfocar la educación hacia el control de nuestras emociones y de nuestras reacciones desde temprana edad, logrando con esto revertir situaciones que condicionen al fracaso por no estar preparados con una mentalidad objetiva, a prueba de fatalidades, que tenga por objeto la costumbre del éxito, el gozo de cada instante de nuestra existencia, y que esto deje como secuela la felicidad anhelada.
Debería existir en el modelo educativo actual una plataforma para trabajar elementos para el desarrollo de la afectividad y los valores, que incluya el inculcar aptitudes esencialmente humanas como el reconocimiento personal, el autodominio, así como el manejo de conflictos y las actitudes positivas tan necesarias para la vida, Actualmente estamos diseñando talleres de inteligencia emocional aplicada para niños, esto con la intención de que desde la temprana edad se familiaricen y conozcan sus emociones, así como sus formas de reaccionar cuando enfrenten situaciones que alteren su orden de vida.
Es indispensable que en las escuelas se eduque con mayor énfasis la inteligencia emocional, que los niños empiecen a conocer conceptos que les cambien su percepción de la vida, que tengan un modelo diferente, para esto es necesario que se instruya también a los padres de familia a través de talleres de interacción con sus hijos, cursos y conferencias en donde ellos aprendan a educar con el compromiso y la responsabilidad de reafirmar en casa lo que el niño aprende en la escuela, es necesaria la capacitación constante y eficaz de los maestros con relación a estos temas que refuerzan la educación en valores, que estos sean portadores y reforzadores del desarrollo integral del niño, a través del ejemplo; que sean en verdad el ejemplo a seguir, que los niños vuelvan a decir con gran ilusión y respeto: “quiero ser como mi maestro”, este fenómeno únicamente se logra cuando actuamos con honestidad y congruencia.
Es un proceso a mediano plazo, no se esperan cambios inmediatos porque se sabe de antemano que la cultura en nuestro país no permite cambios radicales, hay paradigmas arraigados que no se pueden romper fácilmente y las iniciativas gubernamentales presentan carencias de fundamento e investigación pedagógica, las “reformas educativas” son métodos de control y están enfocadas más hacía el área laboral y administrativa; lo que menos buscan es mejorar la calidad de la educación, por el momento es menester de cada persona, comprometerse a poner su esfuerzo y su toque personal para hacer una sociedad diferente moderna y que tenga en sus valores su principal orgullo e identidad
Nos leemos pronto y les invito a escribirme e intercambiar puntos de vista en redes sociales, pongo a su disposición mis datos de contacto y quedo a sus órdenes para comentarios, críticas y sugerencias.
La inteligencia emocional es la capacidad que posee cada individuo para adaptarse a cualquier momento, lugar o circunstancia, salir triunfante ante las adversidades y afrontar con humildad el éxito.
William Navarro